nacen los arremangaos

Somos los arremangaos, y eso va a quedar hay por mucho tiempo, tiene su historia y hoy me apetece recordarla y escribirla, aya voy...

            Una noche de Agosto de Hará unos quince años, nos reunimos en el pueblo casi todos los viejos amigos, Félix, Marrocano, oscar, Tedy, Juanma, fue una de esas juergas que uno no tarda en olvidar, empezamos a recorrer todos los bares del pueblo, con lo que eso conlleva, venga contar anécdotas, cada uno la que mejor recuerda, o mas huella le a dejado, risas, más risas, carcajadas, venga beber, nuestra novias no nos entienden, se consuelan unas a otras y alguna que ya es veterana en esto de recordar, va poniendo en antecedentes a las nuevas, risas más risas.

            A las tantas de la madrugada, en el Púb, y en un estado bastante deplorable debido al alcohol,  empezamos hacer payasadas, bailando, uno hace una tontería y los demás le siguen, total que al final acabamos todos con las perneras de los pantalones remangados hasta la rodilla, no solo eso, si no que a todo aquel que conocíamos, se lo arremangábamos aquello era un cuadro, vaya pintas, era indescriptible.

            En fin, algún tiempo después en una de esas meriendas que preparábamos y en los “praos largos” después de haber dado buena cuenta de unas chuletitas un poquito de chorizo y demás manjares, empezamos a pensar que teníamos que hacer una peña para las fiestas, era una idea que veníamos dando forma desde hacia algún tiempo, puesto que  algunos de nosotros como Juanma, mi hermano Oscar, o yo mismo, ya habíamos tenido alguna experiencia, no pertenecíamos a ninguna, pero si habíamos vivido alguna fiesta con la peña la picota por amistad con algún miembro de la misma, sobre todo para correr el Vitor, y la verdad es que se viven las fiestas de otra manera, se disfruta más, así que pusimos mucha ilusión en el proyecto.

            Elena, cogió papel y lápiz y en ese momento empezó la primera reunión de “la peña de los Arremangaos” hicimos un pequeño estudio de lo que se necesitaría para empezar ese mismo verano, y otro en el cual íbamos proponiendo cosas para años próximos, en el cual iría lo que es nuestro gran logro, y que después, todas las demás peñas incluida la Picota nos ha querido imitar “el cubo musical”

            Cada uno iba dando su opinión a lo que Juanma, Oscar o yo, íbamos proponiendo, empezamos por el uniforme, se propusieron montones de posibilidades, pero unas por la vergüenza que nos podría provocar, otras por inviables y otras por descabelladas, no acababan de convencernos, hasta que en un momento dado y debido al calentó por culpa del whisky, Tomas, primo de Juanma, se retiro del grupo salió a la carretera y al volver, nos había solucionado el problema del uniforme.

             Venia ataviado con un peto de mecánico arremangado hasta las rodillas, saltando y bailando, al verle aparecer todos rompimos en una sonora carcajada, no podíamos parar de reírnos, cuando pudimos calmarnos, empezamos a probarnos el dichoso peto, y después de ir viéndonoslo unos a Otros, empezó a cuajar la idea del peto, salió por votación mayoritaria que ese seria el uniforme, después de discutir mucho, confeccionamos el uniforme que llevamos actualmente.

            Después del uniforme, el cual esta compuesto por: peto azul marino marca “MONZA”, arremangado por debajo de la rodilla, camiseta blanca con dos inscripciones uno en el hombro derecho, que es nuestra mascota y otro el hombro izquierdo, que es el nombre de la peña. Una pañoleta roja con el patrón San Blas y como no las famosas cintas, anudadas en la hebilla derecha del peto y una sudadera blanca con el nombre a modo de escudo en la parte delantera y el muñeco en grande en la parte trasera, nos pusimos manos a la obra encargándonos cada uno de una cosa, quedaba poco tiempo para las fiestas, así que había que darse prisa, lo más importante era buscar el uniforme, José el hermano de Juanma conocía una tienda en Getafe, y allí encargaría los primeros petos, Juanma dibujó los bocetos del muñeco que seria nuestra mascota, y se encargo del tema económico, pusimos una cuota de socio, y gracias al trabajo de todos aquel año nos presentamos en EL Vitor como una peña... pero eso es otra historia. (texto enviado por Benja)